Música y recuerdos: una terapia para el alma en la tercera edad
Música y recuerdos: una terapia para el alma en la tercera edad

La música tiene un poder único: nos conecta con emociones, momentos y personas que han marcado nuestra vida. Para las personas mayores, escuchar canciones de su juventud o melodías que han acompañado etapas significativas puede convertirse en una herramienta de bienestar emocional y cognitivo. Hoy, desde Residencia Comunidad de Valencia, os hablamos de ello.
Música y recuerdos: una terapia para el alma en la tercera edad
Diversos estudios han demostrado que la música estimula áreas del cerebro relacionadas con la memoria y las emociones. Esto significa que, incluso en casos de deterioro cognitivo, como el Alzheimer, una canción puede despertar recuerdos que parecían olvidados. Un bolero, un pasodoble o aquella canción que sonaba en la radio de su adolescencia puede generar una sonrisa espontánea y una conexión profunda con el presente.
Además, escuchar música no sólo es beneficioso para la memoria, sino que también ayuda a reducir la ansiedad, mejorar el estado de ánimo y fomentar la socialización. Cantar en grupo, bailar suavemente o simplemente tararear una melodía son actividades que fortalecen los lazos entre residentes, familiares y cuidadores.
En residencias y centros de día, la musicoterapia se ha consolidado como una práctica habitual por su capacidad para estimular la mente, calmar el cuerpo y alegrar el espíritu. Crear playlists personalizadas para cada persona mayor puede ser una forma sencilla y muy eficaz de acompañarlos en su día a día.
Porque la música no sólo se escucha: se vive, se siente y se recuerda. Y en cada nota, late la oportunidad de revivir la historia personal de quienes más queremos.